Miguel Strzyzowski, el padre de Cecilia, la joven desaparecida desde el 2 de junio pasado en Resistencia, Chaco, pidió que los responsables del femicidio de su hija “paguen lo que le hayan hecho” y aseguró que no les tiene miedo, en referencia a Emerenciano Sena y a su esposa, Marcela Acuña, detenidos junto a su hijo César por el femicidio.
“No puedo pensar que haya gente que pueda hacer eso. No sé si tienen perdón. Es fundamental que los culpables paguen por lo que le hayan hecho a Cecilia. Sinceramente, no sé si tienen poder. Lo fundamental es que los culpables paguen”, aseguró Miguel en declaraciones a LN+, al referirse a los tres integrantes de la familia Sena y a otros cuatro imputados por el crimen de la joven de 28 años.
Por momentos cabizbajo y visiblemente afectado, Miguel reveló que Gloria Romano, madre de Cecilia, fue quien le contó sobre la desaparición de su hija. “Me enteré porque me llamó la mamá. Ahí comenzó una pesadilla. Están diciendo que le hicieron eso de cortarla, y no puedo pensar eso”.
La última imagen de Cecilia data del 2 de junio pasado, cuando una cámara de seguridad la registró entrando a la casa de sus suegros, los padres de su pareja César Sena, todos presos por la desaparición de la joven.
“Necesitamos encontrar algo de ella, por lo menos, algo para poner en una cajita, para poder decir acá está”, dijo sobre los intentos de los investigadores por conocer el destino que tuvo el cuerpo de la víctima.
Por otro lado, sostuvo: “No tengo miedo a esta gente”. Días atrás, se habló de su presunta vinculación con la familia Sena. En ese sentido, explicó que tenía relación con Patricia Acuña, la hermana de Marcela, líder del movimiento piquetero junto a Emerenciano.
Strzyzowski contó que habían sido compañeros en la escuela secundaria y mantuvieron el contacto a través de las redes sociales. Además, dijo que, tras la desaparición de Cecilia, se comunicó con la tía de César Sena y ella trató de convencerlo de que su hija se había ido al Sur del país. Ante su insistencia, la mujer acepto mediar para que pudiera hablar con Marcela, pero nunca logró acceder a la dirigente social que fue detenida el 9 de junio pasado.
“Por mi problema de salud, no salí en su momento. Tengo un par de stent y problemas cardíacos”, detalló sobre los por qués de su ausencia en las semanas previas. Sin embargo, relató que habla “una o dos veces al día con la mamá” de Cecilia. “No importa lo que haya pasado o no haya pasado. Lo que importa es nuestra hija”, subrayó.
“Era mi bebé, era la ‘Yeye’”, enfatizó entre lágrimas Miguel, quien contó que la madre de la joven decía que ella se parecía a él: “Saltaba, cantaba, era mi retrato”.
Por último, señaló que junto a Gloria Romero tratan de que “se haga justicia” por su hija, al tiempo que pidió al presidente Alberto Fernández y al gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, que tomen medidas para que “no haya más Cecilias”.
