Según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), la carne vacuna tuvo en mayo un aumento del 6,1% en promedio. Sin embargo, para los cortes económicos, la suba fue del 8,4%.
Al mismo tiempo, se precisó que el incremento interanual fue del 68,4%. Esto significaría 10,6 puntos porcentuales más que la inflación estimada para el periodo. A su vez, se informó sobre una reducción en la brecha de precios entre el corte de asado, uno de los más populares, y el de pollo.
El CEPA informó que todos los cortes vacunos que se consideraron tuvieron durante el último año aumentos superiores a la inflación general. En ese sentido, el listado es encabezado por el lomo (81,6%), mientras que en el otro extremo está el asado y la tapa de nalga (63,2%).
Entre ambos porcentajes aparecen en orden decreciente el pollo entero (76,4%), el osobuco (74,9%), la picada especial (69,5%), el vacío (67,1%), la bola de lomo (65,4%), la tapa de asado (65,1%) y el matambre (64%).
De esa manera, CEPA repasó la evolución del precio de la carne vacuna en los últimos dos años y señaló al respecto que "luego de las subas por encima del 75% de los precios al mostrador de la carne vacuna en 2020 (el doble que la inflación de ese año), el primer semestre de 2021 comenzó con nuevas subas que totalizaron otro 35% de aumento".