Biden: "Si miramos a otro lado, Ucrania y Europa caerán ante Rusia"
El presidente de EEUU prometió que no abandonarán a Kiev ante la invasión rusa.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió “no abandonar” la defensa de Ucrania durante una ceremonia en Francia por el 80.° aniversario del Día D, el desembarco de las tropas aliadas en Normandía.
“No desviaremos la mirada de Ucrania. Si miramos hacia otro lado, Ucrania caerá bajo el yugo ruso, y entonces toda Europa caerá también”, sostuvo Biden desde el cementerio estadounidense de Colleville-sur-Mer, donde descansan los restos de más de 9000 soldados que murieron durante la gesta militar para liberar Europa de los nazis.
“El aislacionismo no era la respuesta hace 80 años. Y sigue sin ser la respuesta hoy”, agregó y advirtió de que “la democracia está más amenazada que nunca”.
El mandatario estadounidense insistió en que “no podemos plegarnos ante los dictadores” y en que, si se hiciera, se estaría olvidando lo que ocurrió con la liberación de Europa del régimen nazi hace 80 años. ”¿Estamos dispuestos a levantarnos contra la tiranía, a defender la democracia y la libertad? La respuesta sólo puede ser sí”, señaló, después de subrayar que ceder ante los matones “es impensable”.
En alusión a las batallas que se produjeron en Normandía hace 80 años, concluyó: “Los que dejaron su vida aquí, salvaron el mundo. Hay que estar a la altura de su sacrificio”.
Biden participa de las ceremonias junto con el presidente francés Emmanuel Macron, el rey de Inglaterra Carlos III, el canciller alemán Olaf Scholz, el presidente italiano Sergio Mattarella y el ucraniano Volodimir Zelenski, en una muestra de apoyo de las potencias occidentales a Ucrania en la querra que libra contra Rusia.
En paralelo a este programa, Biden conversará con su homólogo ucraniano sobre cómo seguir apoyando a su país. Ambos deben conversar de nuevo durante la cumbre del G7 prevista en Italia del 13 al 15 de junio.
Rusia, gran ausente de las conmemoraciones
La gran ausente de las conmemoraciones es Rusia. Pese al alto precio que pagó la Unión Soviética en la victoria final (27 millones de muertos civiles y militares), el presidente ruso Vladimir Putin no fue invitado, al contrario que hace 10 años, debido a la invasión de Ucrania. “Esta guerra de agresión es una traición a los mensajes” del Día D, explicó Macron al programa de televisión Quotidien para justificar la no invitación de su par ruso, a quien había “escrito”.
El presidente francés, quien advirtió en abril que Europa “puede morir” por la ofensiva rusa y no descartó en enero el envío de tropas aliadas a Ucrania, aprovechó las ceremonias del Día D para trazar un paralelismo con el actual conflicto ucraniano.
“Si durante varias décadas el recuerdo de los errores del pasado sostuvo la firme voluntad de hacer todo lo posible para evitar que estallara un nuevo conflicto mundial abierto”, hoy ya no es así, abundó por su lado el papa Francisco en una misiva difundida el miércoles.
“Es con el más profundo sentido de gratitud que los recordamos a ellos y a todos los que sirvieron en ese momento crítico”, dijo el rey de Inglaterra, Carlos III, en la localidad francesa de Ver-sur-Mer, donde rindió homenaje a los soldados aliados y a los civiles franceses que perdieron la vida, así como al coraje de la resistencia francesa. “Las naciones libres deben unirse para oponerse a la tiranía”, afirmó.
200 veteranos en la ceremonia
El presidente francés también invitó a 4000 personas, entre ellos unos 200 veteranos, los últimos sobrevivientes de las decenas de miles de soldados que arriesgaron sus vidas en las arenosas playas y acantilados de Normandía, bajo el intenso contrafuego alemán. El mandatario les prometió que “Francia nunca olvidará” su batalla para liberar a Europa de los nazis.
El 6 de junio de 1944, el “Día D”, una fuerza de 156.000 soldados, cientos de barcos y 20.000 vehículos alcanzaron las playas del norte de Francia donde los nazis no los esperaban.
Esta titánica operación contribuyó decisivamente al fin de la Segunda Guerra Mundial en territorio europeo en 1945, con la Alemania nazi, atrapada entre dos frentes, el Atlántico, en el oeste, y la Unión Soviética, en el este.