El presidente de Uruguay Luis Lacalle Pou logró mantener su reforma integral en el referéndum de este domingo. Con el 99% de votos escrutados, el “No” obtiene más del 50,5% de los votos lo que significa que los 135 artículos de la LUC que estaban en disputa continúan vigentes.
El porcentaje definitivo depende de la fórmula que se utilice ya que muchos medios locales suman los votos en blanco al “NO”, por eso amplían la ventaja para el respalda al Gobierno y lo llevan al 51,17% frente al 48,88% de la oposición.
La Ley de Urgente Consideración, popularmente conocida por sus siglas “LUC”, llegó al Parlamento uruguayo con el gobierno de Luis Lacalle Pou en marzo de 2020. Fue la primera ley que promulgó el Poder Ejecutivo, que pasó con mayoría parlamentaria gracias a la “coalición multicolor” de partidos de derecha que se formó durante la campaña electoral.
Se trata de un conjunto de 476 artículos que cambiaron varias normas, la ley insignia del gobierno de Luis Lacalle Pou.
¿Qué cambió? Muchísimas áreas. Por ejemplo, dentro de los artículos vinculados a la seguridad pública se duplicaron las penas para adolescentes que delinquen, se aumentó la condena para el tráfico de drogas y se crearon nuevos delitos.
Con respecto a la educación, se eliminaron los consejos desconcentrados, se incorporaron nuevos mecanismos de validación de la formación docente y nuevos estatutos para funcionarios docentes y no docentes. Las reformas de seguridad y de educación son, dentro de la ley, no solo las temáticas más candentes a nivel público sino que, además, las propuestas que más identifican al gobierno de Lacalle Pou.
En otras áreas, aparecieron regulaciones al derecho de huelga, el nuevo régimen de alquiler sin garantía, el de fijación del precio de los combustibles, la flexibilización de controles del lavado de activos, entre varios otros.
Los artículos puestos a consideración abarcaban, a su vez, temáticas bien distintas. Desde la creación del delito de agravio a la autoridad policial hasta el cambio en el método de fijación de precios de los combustibles o modificaciones en el régimen de adopciones.
El referéndum en contra del corazón del paquete legislativo fue impulsado por organizaciones sociales, la central sindical PIT-CNT y el opositor Frente Amplio (izquierda), que recolectaron muy por encima de las 672.000 firmas necesarias, equivalentes al 25% del padrón electoral, para hacerlo realidad.
Dada la heterogeneidad y complejidad de asuntos tratados, la elección se terminó transformando en una suerte de plebiscito sobre la gestión de Lacalle Pou.
El mandatario uruguayo esperó hasta que el conteo de votos alcanzara el irreversible 99% del escrutinio y prometió que Uruguay va a seguir abriéndose al mundo. “Tenemos que dejar de participar de un bloque que a veces es demasiado proteccionista”, aseguró.
Lacalle Pou defendio la norma, resaltó que fue ampliamente discutida con la oposición en el Parlamento y también aseguró que está convencido del proyecto y que se mantendrán por el camino que han emprendido en los últimos dos años. También aseveró que desde este lunes empezarán a profundizar en temas relacionados con la educación, elaborando proyectos que serán llevados nuevamente al Parlamento para ser discutidos.