El primer ministro británico, Boris Johnson, calificó al presidente ruso, Vladimir Putin, de "criminal de guerra" y pidió a los países miembros de la ONU que condenen la invasión rusa de Ucrania y "exijan" su retirada, en una votación que se hará este miércoles en la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
En una intervención en la Cámara de los Comunes, Johnson afirmó que Putin es culpable de cometer crímenes de guerra tras el uso indiscriminado de bombas de racimo desde que lanzó su invasión a Ucrania, hace una semana.
"Lo que ya hemos visto del régimen de Vladimir Putin en el uso de las municiones que ya han lanzado sobre civiles inocentes, en mi opinión, ya califica plenamente como un crimen de guerra”, dijo Johnson respondiendo a las preguntas de los parlamentarios.
Aseguró que Putin cometió un grave error de cálculo en su "aborrecible" ataque a una nación soberana y subestimó la extraordinaria fortaleza del pueblo ucraniano y la unidad y determinación del mundo libre para hacer frente a su barbarie e instó a la ONU a condenar con más fuerza la invasión rusa a Ucrania.
"La Asamblea General de la ONU votará y pedimos a todas las naciones que se unan a nosotros para condenar a Rusia y exigir a Putin que devuelva sus tanques a casa", afirmó el premier británico, citado por medios británicos.
Advirtió en cambio que si el presidente ruso redobla la apuesta, ellos también lo harán aumentando la presión económica y apoyando a Ucrania con financiación, con armas y con ayuda humanitaria.
"Estamos decididos a hacer todo lo posible para ayudar a los ucranianos que huyen del escenario del conflicto", subrayó el primer ministro.
Este miércoles a la mañana Johnson habló con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski para condenar los ataques contra Ucrania y le adelantó que el Reino Unido estaba reuniendo a los miembros de la Asamblea General de la ONU para garantizar la condena más fuerte posible a Rusia en la reunión de la ONU.
Compartiendo su disgusto por los ataques a Ucrania, el premier sostuvo que el Reino Unido estaba haciendo todo lo posible para apoyar al pueblo ucraniano y su resistencia.
Ambos mandatarios coincidieron en la necesidad de que las sanciones vayan más allá para ejercer la máxima presión sobre el presidente Putin en los próximos días, informó un portavoz del primer ministro.
El líder laborista Keir Starmer también se mostró de acuerdo en que el país está unido en el apoyo al pueblo ucraniano frente a la agresión rusa.
"Todos estamos consternados por las espeluznantes imágenes que han aparecido en los últimos días, debemos plantar cara a Putin y a los que sostienen su régimen", exclamó el líder de la oposición.
No obstante, Starmer, le reclamó a Johnson por qué aún no sancionó al empresario ruso y propietario del club Chelsea Roman Abramovich por sus vínculos con Putin, en el marco de las sanciones impuestas por el Reino Unido a Rusia tras la invasión a Ucrania.
Johnson, por su parte, argumentó que no es apropiado discutir casos individuales en esta etapa, pero afirmó que las sanciones están teniendo un impacto y adelantó que el Gobierno publicará una lista completa de personas asociadas con el régimen de Putin.
El martes, el Gobierno británico anunció que podría recibir a 200.000 o más refugiados ucranianos, en el marco de un plan que permite la visita de familiares cercanos establecidos en el Reino Unido y que se ampliará para incluir a padres adultos, abuelos, hijos mayores de 18 años y hermanos.
Las empresas del Reino Unido también podrán patrocinar a un ucraniano que ingrese al país, informó el Gobierno.
Se estima que alrededor de 7 millones de personas fueron desplazadas por la invasión rusa de Ucrania y la ONU informó que más de 500.000 ucranianos dejaron el país.