Los países “no deben esperar a que se desarrolle una vacuna contra el COVID-19 para comenzar a planificar y prepararse para su llegada”, afirmó la directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa Etienne. “Hay que pensar que los trabajadores de la salud de primera línea, el personal de respuesta inmediata y los que cuidan a los ancianos deben vacunarse primero, seguidos por los grupos vulnerables como los adultos con afecciones preexistentes, especialmente los mayores de 65 años”, dijo Etienne.
La funcionaria consideró que “el desafío radica en identificar a estos grupos tempranamente y determinar cómo llegar mejor a ellos” y llamó entonces a redoblar los esfuerzos en materia de planificación sanitaria. En una rueda de prensa, la directora de la OPS advirtió que incluso cuando se introduzca una vacuna, “este virus seguirá propagándose y la gente seguirá enfermando. Por lo tanto, no podemos depositar todas nuestras esperanzas únicamente en las vacunas”.
“Todavía necesitaremos diagnósticos para identificar a los que están enfermos y mejores tratamientos para atender a los que se enferman. Continuaremos confiando en medidas tradicionales de salud pública como pruebas, seguimiento de contactos y cuarentenas para minimizar la propagación de este virus. Y seguiremos contando con personas que ejercen el distanciamiento social, lavándose las manos con frecuencia y usando mascarillas en público para proteger a otros de enfermarse”, indicó.
Cuando las vacunas estén disponibles, el llamado Mecanismo COVAX, convocado por la Coalición para la Innovación en la Preparación de Epidemias y la Organización Mundial de la Salud, “brindará a los países de nuestra región la mejor oportunidad para acelerar el acceso a las vacunas para COVID-19 y reducir el impacto de la pandemia en la vida de las personas y las economías". El Mecanismo COVAX "ofrece acceso a una canasta de 15 posibles vacunas”, dijo Etienne para luego recordar que se están estudiando casi 200 candidatas a vacunas para COVID-19.
“Esperamos que una o más resulten eficaces, pero no hay garantía. Es posible que las primeras vacunas solo brinden una protección parcial o no funcionen para todos. Todavía no sabemos qué vacuna se considerará segura y eficaz y cómo funcionará", advirtió. Etienne aclaró que "si no nos preparamos ahora, perderemos la oportunidad de beneficiarnos rápidamente. La verdad es que los países no pueden esperar a tener todas las respuestas antes de comenzar a planificar y prepararse para administrar una vacuna para COVID-19”.
El Mecanismo COVAX, incluido el instrumento de financiamiento de Compromiso de Mercado Avanzado, ha suscrito 64 países autofinanciados y 92 países elegibles para recibir apoyo a través de ese instrumento, dijo. A los países participantes, se les garantizarán dosis iniciales para cubrir al menos el 3 por ciento de su población en las primeras fases de despliegue de la vacuna, a medida que los suministros se pongan al día con la demanda mundial, llegando finalmente al 20% de su población, lo suficiente para proteger a las personas con mayor riesgo de COVID-19 grave, explicó Etienne.
“Nuestra región tiene un sólido legado de programas de inmunización que nos ayudan a planificar el futuro”, agregó. La OPS está bien preparada para ofrecer cooperación técnica a los países para que puedan preparar e implementar sus campañas de vacunación, “desde la planificación y estimación hasta las comunicaciones, desde la reglamentación hasta la capacitación" del personal de salud. “Por lo tanto, insto a los países de todo el mundo a prepararse para una vacuna contra el coronavirus, pero también a ser realistas, sabiendo que estos preparativos no reemplazan todo lo que debemos hacer hoy para salvar vidas”, concluyó Etienne.
🚨 Vacuna #COVID19 👉 "Los gobiernos deben proporcionar una guía clara sobre la vacuna. La desinformación durante las actividades de vacunación cuesta vidas". @DirOPSPAHO pic.twitter.com/rOFPTuqJYw
— OPS/OMS (@opsoms) September 25, 2020