España reportó este lunes que no registró ninguna muerte por coronavirus en la última jornada, por primera vez desde marzo, por lo que la cifra total de fallecidos por COVID-19 se sigue situando en las 27.127 personas. Asimismo, los nuevos casos confirmados se redujeron a 71 en las últimas 24 horas, lo que sitúa la cifra total de personas contagiadas, y confirmadas por la prueba PCR, a las 239.638. Además, 11.399 personas han ingresado en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), 9 en los últimos 7 días, y 123.879 han precisado hospitalización.
Según el reporte del Ministerio de Sanidad, 35 personas han perdido la vida en los últimos 7 días. “Tenemos 15 comunidades autónomas que han notificado entre cero y dos fallecidos en los últimos siete días. El dato bueno es que no tenemos notificado ningún fallecido con fecha de defunción de ayer”, destacó Fernando Simón, vocero del Gobierno para la pandemia. El reporte del domingo había arrojado un total de dos fallecidos. En la última semana, la región de Madrid, la más castigada por la pandemia, registró un solo deceso. y Cataluña, 11. “Los datos mantienen la misma tendencia que hemos observado en estas últimas semanas. Nos mantienen en una posición en las que podemos, progresivamente, ir abriendo las medidas de restricción”, añadió el epidemiólogo Simón.
Cuatro pequeñas islas españolas, tres en el archipiélago de Canarias (Atlántico) y una en Baleares (Mediterráneo) estrenan este lunes la última fase del desconfinamiento por la pandemia del coronavirus y se convierten en la vanguardia de lo que vivirá la próxima semana la mitad de España. En las islas de La Gomera, El Hierro, La Graciosa y Formentera desde hoy se podrá, por ejemplo, consumir en el interior de bares y restaurantes, y no solo en las mesas instaladas en la calle (terrazas), que ampliarán su aforo al 75%. También se abrirán los centros comerciales, zoológicos, acuarios o casinos, siempre con limitación de aforo, y se podrán realizar actividades culturales en bibliotecas y museos.
Pero también otras zonas de España estrenan este lunes la fase dos, como la región de Valencia (este) y las provincias andaluzas de Málaga y Granada, lo que supondrá, por ejemplo, el poder acceder a las playas, en unas zonas muy destacadas de la costa mediterránea española. A ellas se unen otras zonas de la región de Castilla-La Mancha, con lo que el 70% de España está ya en la fase dos, a falta de Madrid, Barcelona y su zona metropolitana y las capitales de Castilla y León, las zonas más afectadas por la pandemia, que se incorporaron más parte a la desescalada.
Hemos logrado que el tiempo medio de diagnóstico de #COVID19 sea de 48 horas desde inicio de síntomas. El esfuerzo ha tenido sus efectos sobre la evolución de la epidemia y vamos consolidando los pasos que damos. Esta es la evolución de nuestro país hacia la #nuevanormalidad ⤵️ pic.twitter.com/VJXmG6NWzd
— Salvador Illa Roca/❤️ (@salvadorilla) June 1, 2020
Para gestionar este último tramo del confinamiento, el Gobierno español pedirá esta semana al Congreso la última prórroga del estado de alarma, instrumento legal que ha permitido limitar la movilidad desde el comienzo de la pandemia. Según anunció el presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, esta será una “última y definitiva prórroga”, más “liviana” y distinta a las cinco anteriores antes de regresar a la normalidad. Será la sexta prórroga desde que se decretó el estado de alarma, el 14 de marzo, se prolongará desde el 8 al 21 de junio y será gestionada por las autoridades regionales, con el apoyo, si es necesario, del Gobierno central, que solamente se encargará de las cuestiones relativas a la movilidad.