Alberto Fernández lo tiene decidido y Horacio Rodríguez Larreta lo sabe. Falta el número final y el momento pero el Gobierno nacional reducirá el porcentaje de fondos que traspasa, en concepto de coparticipación, a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), confiaron a Clarín fuentes de Casa Rosada. El jefe de Gobierno porteño podría recurrir a la Corte Suprema de Justicia para frenarlo.
Fernández usará el mismo mecanismo que Mauricio Macri utilizó en enero de 2016 cuando, a poco de asumir la presidencia, por decreto aumentó de 1,4 a 3,75% el porcentaje de coparticipación para la Capital. Ese 2,35% demás -que después quedó en 2,10%- es plata que Nación le dio a la Ciudad por los 20.200 policías que le traspasó. De esa porción, más de un 80% estaría destinado a sueldos de la fuerza.
Pacto Fiscal mediante, el porcentaje luego se redujo a 3,5 puntos. Ahora, cuatro años más tarde, Fernández recorrerá el camino inverso: también a través de un decreto, reducirá los fondos que la Nación gira, por goteo y de manera diaria, a la Ciudad. La baja será al menos de 1 punto. En Casa Rosada no dan una cifra fina ni definitivo pero ante las consultas de Clarín no descartaron que se reduzca de los 3,5 actuales a 2,5 puntos o incluso que pueda bajarse a 2 puntos.
"Lo podríamos hacer ya mismo pero preferimos tener un diálogo correcto y formal con la Ciudad", explicaron a Clarín fuentes de Casa Rosada que, sin dar fecha, dijeron que la decisión es inminente. "Es dinero que la Nación resignó para darle a la Ciudad y son fondos que necesitamos en medio de esta crisis. Lo tenemos que recuperar", explicó el mismo funcionario. Ya hubo repercusiones en Juntos por el Cambio, con uno de sus refrentes en la Ciudad, el diputado Maximiliano Ferraro.
La autonomía de nuestra ciudad es garantía para la República y con su prosperidad, cosmopolitismo, diversidad y libertad aporta solidariamente al progreso de todo el país.
— maxi ferraro (@Maxiferraro) January 10, 2020
Auxilio a provincias ¿podrán pagar el bono de 4 mil pesos a estatales?
El desfile de gobernadores no se detiene en la Casa Rosada. En el primer mes de gestión pasaron por Balcarce 50 23 de los 24 gobernadores para mantener reuniones bilaterales con el Presidente, con el ministro del Interior o el jefe de Gabinete. El cordobés Juan Schiaretti es el único mandatario provincial que no tuvo un encuentro a solas con Alberto Fernández, Eduardo “Wado” De Pedro o el jefe de Gabinete Santiago Cafiero. Solo este jueves 5 gobernadores visitaron la Rosada.
Esta semana, el Presidente, que tiene listo el decreto por el bono de 4 mil pesos a empleados públicos de la Nación, lubricó las cuentas de 5 provincias al autorizar adelantos por coparticipación por más de $5 mil millones. Sin embargo, ya son varios los gobernadores que pasaron por la Casa Rosada y anticiparon que no están en condiciones de afrontar una suma fija para los estatales provinciales. Solo en el entorno del bonaerense Axel Kicillof señalaron que estarían buscando el mecanismo para pagar una suma fija, aunque evitaron confirmarlo.
“No estamos en condiciones de afrontar (el bono). Ya tenemos una agenda pactada. Cada provincia tiene su agenda”, se desmarcó en declaraciones a Clarín el radical Gerardo Morales. Este jueves, el gobernador de Jujuy pasó dos veces por la Rosada. La primera vez se entrevistó con el Presidente; la segunda con De Pedro. El cacique de la UCR aceita su vínculo con el Ejecutivo. Entre el 20 y 30 de enero, el Presidente viajará a su provincia. Visitarán la planta de litio, sobrevolarán la de energía solar y recorrerán las plantaciones de marihuana medicinal.
Morales ya se aseguró $400 millones por adelanto de coparticipación, que se cancelarán antes de fin de mes. Entre los gobernadores peronistas también hay preocupación por la presión que significará el bono en sus territorios. El riojano Ricardo Quintela, que se reunió con De Pedro y este viernes visitará a Cafiero, también expresó cierto nerviosismo. “Vamos a tener problema con los docentes”, le anticipó a este diario.