"Ganaste cuatro Libertadores al pedo"
Sebastián Battaglia, ex DT e ídolo de Boca, reveló detalles del cruce que tuvo con el futbolista que hoy juega en Racing, Agustín Almendra.
El tema durante los inicios del 2022 puso la tensión al máximo en la vida de Boca Juniors. La pelea entre el por entonces entrenador, Sebastián Battaglia, y el mediocampista Agustín Almendra decantó en la salida de uno de los grandes proyectos que había surgido de las inferiores del club. A dos años de aquel conflicto, el ex DT dio un detalle hasta ahora desconocido del cruce que lo llevó a marginar al futbolista.
El futbolista más ganador en la historia del Xeneize repasó aquel enfrentamiento con Almendra en el segmento Líbero vs. que se emite por TyC Sports: “Las reglas están para cumplirse, sino es cualquier cosa. Cada uno hace lo que quiere. Vos estás en un grupo y sos parte de esto. Y hay una cabeza, un entrenador, y una parte de dirigentes”.
El periodista Matías Pellicioni le preguntó: “¿Es verdad que te dijo “como jugador ganaste todo pero como entrenador sos un desastre?”. Battaglia no dudó y amplió aún más lo sucedido: “Sí, sí... Y lo voy a decir porque no tengo ningún problema. Me dijo esa parte y hay otra parte en la que me dice: ‘Vos ganaste cuatro Libertadores al pedo’. Menos mal...”.
En esa línea, reflexionó: “Quizás le comen la cabeza de otro lugar y los confunden. Llegan a un entrenamiento pensando una cosa que quizás el entrenador piensa otra. Si yo lo veo que no está bien o haciendo las cosas bien, tengo que elegir. ¿Sino para qué estás ahí?”.
En ese adelanto del segmento que se verá completo en las próximas horas, Battaglia también aclaró que es “raro” no ver a Boca jugar la próxima Libertadores: “Me ha tocado dirigir y poder clasificar a Boca a la Copa Libertadores, que nos agarró en una etapa difícil cuando nos tocó a agarrar. Pudimos clasificar a esa Copa que es la que me toca jugar a mí, después dejamos al equipo clasificado para la que viene que juega Almirón y llega a la final... Ahora no estar clasificado, a veces uno no valora lo que tiene y se da cuenta cuando no lo tiene más. Y a nosotros nos pasa con esto”.
Si bien cuando estaba al frente del plantel intentó minimizar lo sucedido como un “intercambio de opiniones”, hay que tener en cuenta que Battaglia ya se había referido al tema Almendra en el pasado luego de dejar el cargo: “Lo que se vivió ese día no lo viví nunca ni como jugador ni como entrenador. No fue nada feliz lo que se vivió, pero era la decisión que tenía que tomar. Me intentaron convencer de que diera marcha atrás porque es patrimonio del club y fue difícil, pero no podía volver a incluirlo por el vestuario y por respeto. Nunca me pidió disculpas, no volví a hablar con él para nada”.
El ex mediocampista de 43 años ganó 4 Libertadores (2000, 2001, 2003 y 2007), pero además en el plano internacional levantó dos Intercontinentales (2000 y 2003), además de tres Recopas Sudamericana (2005, 2006 y 2008) y una Sudamericana (2005), independientemente de los títulos a nivel local que alzó. Durante su estadía como DT, se quedó con la Copa Argentina y la Copa de la Liga.
¿Qué ocurrió para que el talentoso mediocampista surgido en la gran Categoría 2000 de Boca y por el que el Napoli de Italia llegó a ofrecer nada menos que 18 millones de dólares se vaya por la puerta de atrás del club? El gran quiebre de su relación contractual con la institución que lo formó y vio nacer fue tras el exabrupto con Battaglia, quien tomó la determinación de marginarlo del grupo profesional a principios de 2022, con la venia de los referentes.
El volante de 22 años que desde niño fue comparado con Juan Román Riquelme debutó en la Primera de Boca de la mano de Guillermo Barros Schelotto, quien estuvo cerca de mandarlo a la cancha nada menos que en la revancha de la final de la Copa Libertadores 2018 que iba a disputarse en el estadio Monumental y finalmente fue trasladada a Madrid. Al año siguiente, Almendra estuvo en la consideración de Gustavo Alfaro y se dio el gusto de jugar el Mundial Sub 20 con la selección argentina en Polonia. Tras su participación en el certamen internacional, varios equipos europeos de renombre se interesaron en sus servicios, aunque tal era la proyección del juvenil que la anterior gestión decidió no venderlo. Roma, Barcelona, Valencia, Sevilla, Atlético Madrid, Manchester City y Porto aparecieron en el radar. Inclusive medios italianos especularon con la idea de que abonaran su cláusula de salida, tasada en 30 millones de euros.
Desde la asunción de Miguel Ángel Russo en la conducción técnica, Almendra perdió protagonismo y se desmoronó anímicamente por algunas cuestiones personales que arrastraba del pasado, más precisamente por problemas con la Justicia de algunos familiares cercanos. Como para casi todos por la pandemia del coronavirus, el 2020 fue casi un paréntesis para Agustín, que demoró su reincorporación a los entrenamientos y tiempo después confesaría que estuvo cerca de abandonar el fútbol. Desde el Consejo de Fútbol trataron de convencerlo de que la mejor opción era seguir ligado a su profesión, pero a tal punto llegó el límite de desobediencia que lo multaron económicamente.
“Pensé en dejar, fue una mala decisión, pero ahora estoy muy contento”, confesó después de retomar la actividad en 2021 el chico que fue titular en el Superclásico contra River válido por la revancha de las semifinales de la Libertadores 2019. El Patrón Bermúdez ilustró su realidad: “Lo acompañamos, estuvimos con él. Le pusimos la mano en el hombro. Yo en su momento me lo llevé para un lado y le hablé un poquito fuerte. No pasa nada, somos amigos. Lo quiero mucho”.
Cuando asomaba la cabeza, otro golpe: una lesión de tobillo en plena pretemporada invernal de 2021 le impidió estar presente en la serie eliminatoria ante Atlético Mineiro por la Libertadores. Almendra quedó nuevamente relegado de las canchas cuando había obtenido la titularidad de forma continua por primera vez como profesional. Se recuperó, batalló y volvió a jugar. Retomó la actividad pese al cambio de entrenador (Battaglia reemplazó a Russo) y cerró su muy buen año siendo titular en el amistoso contra Barcelona por la Maradona Cup en Arabia Saudita.
Al margen de ser arropado por los integrantes del Consejo de Fútbol, Almendra contó con la contención de un compañero que fue trascendental para que diera vuelta la página: Marcos Rojo. El hoy capitán xeneize ofició de tutor y consejero tanto dentro de la cancha, como en el vestuario y fuera del club. El ex Manchester United compartió vacaciones familiares y se hizo íntimo del chico que parecía retomar la redituable senda del fútbol. Inclusive pasaron a compartir la misma agencia de representación. Pero una bomba estallaría a principios de 2022.
Almendra ya había tenido algún cortocircuito con el DT Sebastián Battaglia durante la pretemporada. Aunque fue previo a un partido contra Independiente por la liga local que directamente fue separado del plantel profesional. Un insulto al técnico tras la agresión a un compañero en plena práctica de fútbol fue la gota que rebalsó el vaso. El entrenador citó a los referentes y recibió su apoyo para que fuera relegado a la Reserva. Darío Benedetto, entre otras palabras, declaró públicamente: “Más allá de ser titular o suplente, siempre tiene que estar sumando. En este caso no era así, nunca entendió Agustín la camiseta que tenía puesta. Es una decisión correcta y hoy estamos muy contentos”. Esta vez ni Rojo pudo tenderle la mano.
El último partido oficial que disputó en Boca fue en febrero de 2022 frente a Rosario Central en cancha de Vélez (ingresó 8 minutos desde el banco de suplentes). Tras un mes y medio, recién pudo reaparecer en la Reserva y se mostró en gran nivel. Por ese entonces, Battaglia continuaba al frente del primer equipo y eran justamente Hugo Ibarra y Mauricio Serna los que comandaban al segundo equipo. No obstante, Battaglia fue tajante y le planteó al Consejo de Fútbol que era Almendra o él. Si lo indultaban, estaba dispuesto a dejar su cargo.
Cuando parecía que la situación de Almendra iba a modificarse con la asunción de Ibarra al primer equipo, fue el propio jugador el que le avisó a la directiva que no quería renovar el vínculo que expiró a mediados de 2023 por su aspiración de probar suerte en el fútbol europeo. Sin embargo, algunos ofrecimientos desde el Viejo Continente se disiparon y terminó recalando en Racing, donde también había sonado, equipo del cual es hincha confeso y hasta donde llegó a enfrentar a Boca en los cuartos de final de la Libertadores pasada.