Boca quedó eliminado de la Copa Libertadores: perdió por penales 3-1 ante Atlético Mineiro en los octavos de final de la Copa Libertadores, luego de dos empates 0-0. Sin embargo, en un duelo muy parejo en Belo Horizonte, el Xeneize pudo haber ganado en los 90′, pero le anularon un gol a Marcelo Weingand por un polémico offside en el inicio de la jugada.
MIRÁ EL RESUMEN A CONTINUACIÓN:
Es que mientras se trasladaba hacia los vestuarios, parte de la delegación de Boca se cruzó con agentes de seguridad y eso no hizo más que encender la mecha. Allí, los jugadores de la Ribera arremetieron contra los dueños de casa y los agentes de seguridad, derribando vallas y lanzando objetos contundentes. A Sebastián Villa, por caso, se lo puede observar en los videos arrojando un dispenser.
Y a Jorge Bermúdez, integrante del Consejo de Fútbol, insultando a alguien: “Pedazo de puto”. En ese instante, el accionar boquense fue repelido con gas pimienta. En el inicio del caos se los ve a Raúl Cascini y el Chelo Delgado, los otros laderos de Riquelme en el Consejo, y al propio Miguel Ángel Russo, que protestan y gritan airadamente. Eso generó los roces con los agentes, sobre todo cuando uno, identificado con el N° 145, parece responderle al ex volante.
Pero los ánimos no se calmaron allí. Los integrantes del plantel xeneize difundieron imágenes en los pasillos del estadio en los que se puede apreciar la represión policial y a varios jugadores y allegados afectados por los gases lacrimógenos.