La estadía de Diego Armando Maradona en Gimnasia de La Plata duró poco más de dos meses: el presidente Gabriel Pellegrino anunció oficialmente que el Diez no seguirá a cargo del equipo. “Maradona dejó de trabajar hoy, ya no es más el técnico de Gimnasia. Maradona trabajaba en un esquema de unidad. Él dijo que está para sumar, no para dividir. Le encantaría seguir, pero quiere la unidad. No se dio”, explicó el presidente del club en diálogo con el programa Un buen momento por Radio La Red. "Contra Arsenal dirige Messera”, anunció Pellegrino sobre el partido del próximo domingo en La Plata desde las 19.40 por la 14ª jornada de la Superliga. “Nos vamos a juntar hoy a la tarde. El plantel va a entrenar con el técnico de la Reserva, no viene el Gallego Mendez ni ninguno de su cuerpo técnico”, agregó.
El Diez había sido presentado oficialmente el 8 de septiembre ante un Bosque colmado: duró ocho partidos en los que cosechó tres victorias (contra Godoy Cruz, Newell’s y Aldosivi; todas en condición de visitante) y cinco derrotas. “La reunión de hoy fracasó. Va a haber elecciones el sábado”, explicó el máximo directivo sobre los comicios del próximo sábado 23 de noviembre que darán un nuevo presidente a la entidad. “Se predispuso y dio un tiempo más para lograr la unidad. Tuvo una predisposición genial: una demostración que él estuvo más a la altura que nosotros como dirigentes. Ya veníamos hablando desde hace un mes del tema de unidad. Con Diego hablamos ayer y dijo que si había una posibilidad más que nos uniéramos, se iba a su casa esperando volver mañana. Nobleza obliga: le tuvimos que avisar rápido que la unidad fracasó. El sábado hay elecciones y cualquiera de ellos dos va a buscar otro técnicos”, avisó Pellegrino en una conferencia.
Esta mañana, los distintos sectores políticos de Gimnasia intentaron elaborar una jugada de último momento para retener al Diez: los referentes de las dos agrupaciones que se presentarán en las elecciones (Mariano Cowen, de Gimnasia Grande, y Salvador Robustelli, de Convergencia Gimnasista) firmaron un acta en la que se comprometieron a trabajar en conjunto (incluyendo al actual oficialismo) tras los comicios. Una movida similar a la “unidad” reclamada por Maradona. Pero en el escrito no incluyeron explícitamente al actual titular del club, Gabriel Pellegrino. Y eso, en la evaluación del Diez, le quitó credibilidad. Además, tanto Cowen como Robustelli, según la información que manejaba Maradona, pretendían aplicar un plan de austeridad. En consecuencia, el entrenador entendió que no iba a poder reforzar el plantel con la cantidad y calidad de nombres que creía necesario para intentar la epopeya de mantener al Lobo en la Superliga.
En las últimas horas, Maradona le había advertido al plantel que se marcharía. En esa reunión, el capitán Lucas Licht le pidió que continuara al menos hasta fin de año y desató las lágrimas del ahora ex entrenador. Algo similar intentaron sus colaboradores más cercanos (Adrián González y Méndez), quienes a pesar de apoyar la determinación del líder del grupo le propusieron acompañar a los jugadores hasta el cierre del año. Frente a esta situación, Diego decidió culminar su séptima experiencia como entrenador tras haber pasado por Mandiyú (1994), Racing (1995), la selección argentina (2008 al 2010), Al-Wasl (2011/2012), Al-Fujairah (2017/2018) y Dorados de Sinaloa (2018/2019).