"Los que hablan de la libertad son negacionistas de la dictadura"
Lo dijo el presidente de la Nación, Alberto Fernández, durante un acto en San Juan. El mensaje estaría destinado a Javier Milei.
El presidente Alberto Fernández calificó este lunes al candidato presidencial de la Libertad Avanza, Javier Milei, como un “negacionista de la dictadura” al encabezar un acto en la provincia de San Juan y en la previa del homenaje que realizará esta tarde Victoria Villarruel a las víctimas de ataques terroristas perpetrados en los 70′s.
“Nosotros no somos negacionistas del cambio climático, nosotros no somos negacionistas de la dictadura, los negacionistas son los que hablan de la libertad”, aseguró el jefe de Estado.
Y continuó: “Tampoco somos parte de una casta, la verdadera casta está protegida por los que dicen estar en contra de la casta y es la casta económica argentina, que posterga el desarrollo del país para seguir concentrando el ingreso y la riqueza en unos pocos; esa es la verdadera casta y contra esa casta hay que pelear”.
Las palabras del Presidente se dieron en la inauguración de 788 viviendas en la localidad de Pocitos, en un acto en el que estuvo acompañado por el gobernador Sergio Uñac, el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, Santiago Maggiotti, y autoridades locales.
Esta tarde, desde las 17, se hará en el Salón Dorado de la Legislatura de la Ciudad de Buenos que organiza la candidata a vicepresidenta por La Libertad Avanza (LLA), Victoria Villarruel, en el que hará un homenaje a las víctimas del terrorismo de organizaciones armadas como el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) y Montoneros. Esa convocatoria provocó el rechazo de otros sectores del arco político y que distintos organismos de derechos humanos y del sindicalismo se movilicen en un acto de repudio en la calle Perú al 100. La zona fue vallada por la Policía porteña previendo que se produzcan incidentes.
“Les pido que a la hora de votar, nos tocaron cuatro años espantosos de la humanidad para gobernar, y sin embargo le pusimos el pecho y la sacamos adelante y les pido que no retrocedamos, cuando llegue la hora de votar hace falta que (Sergio) Massa sea presidente”, pidió Alberto Fernández con tono enérgico en otro tramo de su alocución.
También intentó diferenciarse del candidato libertario Javier Milei, quien en las Primarias resultó el candidato más votado relegando al segundo lugar a Juntos por el Cambio y dejando en el tercer lugar al oficialismo de Unión por la Patria, al referirse al rol del Estado, que en esta oportunidad financió junto a la provincia cuyana la construcción de viviendas para quienes fueron víctimas de un terremoto en enero de 2021.
“Los problemas de los argentinos no se resuelven sacando al Estado. El 70%” de los gastos públicos están orientados a las jubilaciones y a la asistencia de los que más necesitan”, aseguró. “¿Qué van a ajustar? ¿Qué van a sacarle a los jubilados?¿Qué es lo que quieren hacer?”, se preguntó.
Como una suerte de autocrítica de su gestión que culmina el 10 de diciembre manifestó que “la situación no es fácil. Sabemos el problema que genera la inflación en los ingresos de la gente. Ese problema no se resuelve sacando el Estado del medio”.
Las críticas del Presidente hacia Milei también se habían producido el jueves, cuando inauguró un tramo de la ruta número 3 en la localidad de Famatina. Allí se había opuesto a la eliminación del ministerio de Obras Públicas y había fustigado a los políticos que tienen “una fachada de rockstar” pero que esconden “una enorme mentira que engaña a los jóvenes y a los confundidos”.
En esta oportunidad el primer mandatario eligió confrontar con Milei sobre su política de derechos humanos. En el homenaje que prepara la diputada nacional Villarruel serán evocados tres actos terroristas que tuvieron lugar antes del golpe de Estado, durante el gobierno constitucional de Isabel Martínez de Perón. Se escucharán los testimonios de Lorenza Ferrari, madre de Laura, una estudiante de 18 años que murió por la explosión de un coche bomba de Montoneros en 1975; el de Graciela Saraspe, hija de Héctor, encargado de un bar, asesinado en Santa Lucía (Tucumán) por el ERP, en 1974, y el de Arturo Larrabure, hijo de de un militar secuestrado y asesinado por el ERP luego de pasar más de un año encerrado en un calabozo en 1975.